jueves, 25 de octubre de 2007

6 am + 3 sobre cero

Igual a: las 9 vidas que perdí al salir de la casa, de noche aún y sin la cobija que cariñosamente me abrigó durante las 4 horas y media que alcancé a dormir.
Y cuando salí del metro Tacubaya, ya eran las 7 y todavía no clareaba... Con los mismos 3 graditos.
Pero no me quejo, me gusta el frío. Puedo arroparme con toneladas de lindos abrigos y suéteres de choncho estambre sin importarme cuántos kilos se me vean de más.
Y qué tal unos guantes, un gorrito monón, calcetas hasta el cuello y en un taxi colectivo (vamos 4 trabajadores y pagamos 20 pesos c/u) equipado de un confortable aire acondicionado que soplaba cálido aliento de querubines, mientras la seño de al lado llamaba a misa y se recargaba en mi costado. No me quería bajar.
Ahora, hay un sol bien brillante. Y un frío más tolerable.
Las noticias avisan tiempos helados los próximos días.
Y, la verdad, me gusta el chocolate caliente. Mi nueva afición otoñal.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

abrigate mucho,por aki ace frio,estoy con catarro!!!
gracias por leerme siempre!!!
sin conocerte,te tengo aprecio.
saludos catalanes.

Nik dijo...

Me robe un poco de frio, el lunes y martes, veo que el jueves sigue igual... (bingo son las 16:30 y ha salido el sol)...
Una torta y un champurrado, hubieran sido mejores alternativas de soportar la ciudad de Mèxico.
La intrascenciencia de los kilos, (salvo en dólares de equipaje) dolores de espalda, una buena gabardina, hace más elegante el asunto.
Saludos.
NIK

erMoya dijo...

Pues nada, manta, brasero y mucho chocolate caliente para combatir el frío ;)

Besos!