No me he parado por una sala ni por error. Ni siquiera para hacer un listado estúpido de las producciones que nunca veré en mi vida. No he leído al respecto ni por compromiso, pues si he escrito sobre cine para la revista, ha sido sin consultar, porque recuerdo los nombres de actores y la trama de las que me esmero en recomendar. Es que hay tantas opciones... (ajá)
No es suficiente. Después de "Natural Born Killers" (qué vergüenza, no la había visto), la última cinta fue "El rey del barrio" (por millonésima vez), pero a la media hora cerré los ojos tendida en la alfombra para no abrirlos, sólo para conducirme a la cama.
Señores, estoy dispuesta a todo con tal de salir airosa y dejar de decir que no he visto nada en 35 mm. Ni siquiera en digital. No importa la historia, la hechura, el reparto. Qué más da si es The Rock con Adam Sandler y el nombre del filme sea algo así como "Atrapen a esos idiotas" o "Lo que pudo pasar en la cama de John cuando Tom llegó de Alaska" o yo qué sé. No importa si es Lindsay Lohan imitando al bodrio de Britney, que a su vez se burle de Paris, mientras Nicole Richie come gusanos, recordando sus momentos felices en "Simple Life", en una historia de Carlos Reygadas. Por Dios, sólo quiero ver cine.
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3 comentarios:
¡Que espeluznante escenario! nada mas falto con guión original de Alfonso Arau en cooparticipación con Retes y Jodorovsky...
Por donde lo vean, lo espeluznante es no ir al cine. No importa, como dice Púrpura, qué filme, no importa si es tres veces los simpson (que sólo un compulsivo haría eso y luego lo justificaría, jajaja), el asunto es la falta de cine... yo me voy si todo me ayuda al festival de cine francés hoy... no sé cuál, no sé cómo, pero me voy.
Te comprendo amiga, sin cine ... no hay cómo.
Comparto la idea... No se puede vivir sin él. Es un cuento que se necesita ver antes de dormir. Así es Purpu, qué demonios importa los actores, el director, el distribuidor, con o sin palomitas, es necesario ver otras historias, es necesario que nos cuenten otras historias.
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