¿Qué harías si fueras una de las figuras más cotizadas y, de pilón, más sexies del 2008? Atractiv@, triunfador@, con un chingo de chamba y que el talento sea la bendita cualidad que te diera de comer... y divertirte y gozar de la delicias de la 'fama' y más delirantes y lucrativas etcéteras. Si ya mencioné las inevitables acciones en esta enorme lista, hay una más que por ningún motivo hay que dejar pasar: ¿yo? Conservar la soltería.
Pero mi querido, deseado y soñado Javier Bardem no tomó muy en cuenta este atributo y ya empezó a tener problemas, de los que su h. servidora no tiene nada que decir, aunque mucho que renegar.
Pues con la 'novedad' de que la dulce Pe lamentó el 'incumplimiento' de esa promesa que los dos hicieron cuando se aventaron al noviazgo, ya que el pacto consistía en tomarse un año sabático para disfrutar la relación. Es que el español de mis pecados nocturnos aceptó trabajar en la nueva cinta de Iñárritu (luego de negarse a trabajar con Coppola), porque se dice que es un papel a la medida del actor (a mí me da como asquito el remplazo del apellido, pero, bueno...), y del break ni hablar.
¡Qué inconsciencia, dios santo! Pues esa chamaquita, ¡¿qué esperaba, teniendo a un figurón de tal calibre?!
De veras, qué pena, chaparrita, pero este muchachote por supuesto que se ve mejor sin ti. Mira:
... Y sufre.