domingo, 4 de enero de 2009

No me salvé... por ahora

Los escalofríos se encuentran en un grado preocupante. También los estornudos, la somnolencia y la cantidad de flujo nasal.
¿Por qué un día antes de reingresar a las filas laborales? ¿Será que mi cuerpo ha respondido a la inconformidad? ¿Y por qué en la semana de cierre?
El año pasado tuve sólo indicios de gripa, los cuales hicieron que rápidamente detuviera la enfermedad con remedios muy poco ortodoxos, entiéndase Red Bulls, suplementos con altas dosis de vitamina C, entre dos y cinco antigripales en una sola toma y muuucha actitud. Sí, todo al mismo tiempo.
Bueno, pues ya era hora de que el virus visitara este cuerpecito que se resistió a ser uno más de los que padecieron los mocosos estragos el año anterior, porque parece que ahora sí es en serio... Aunque no me doy por vencida y he tomado las medidas que me resultaron exitosamente.
Ni pedo, si ya me dio, a tragar antihistamínicos y andar como idiota sin fumar, sin alcohol y con mucho café en los días venideros. Reshit.