Nueve de la mañana, café, pan tostado, tele encendida y una escoba y trapeador esperando ser usados en contra de mi voluntad. Finalmente cedí y la casa reluce de limpia. Ahora voy yo.
Faltan dos días de claustro y buena dosis de cine en el cajón.
El fin de semana seguiré en pijama.
Gracias, Dios, eres tan bueno conmigo y mi gran fiaca...
2 comentarios:
buen fin de semana y que agusto se esta en pijama...
besos dulces.
TE QUIERO, BONITA!!!!
Besos sabatinos!
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