Y sin cumplirse los 50

Aunque no canto 'victoria', los Potros están en la final del Apertura. Soy rejega a este deporte, sin embargo, cuando se trate del Atlante, me cuadro y digo: ay, ojalá y ora sí. Señores, no es el pambol, es más una vieja tradición y cercanía al equipo (ahora un híbrido barriosinidentidadcosteño) que desde tiempos lejanos ha ocupado un lugar muy especial. Ora sí que por el amigo de una tía, que es hermana de mi papá, le tenemos cariño al equipo azulgrana.
Ah, ese banderín desgastadón en una de las paredes de la sala (algo tenía de folclórico mi padre) que anunciaba la preferencia deportiva de los Rodríguez. Pero aclaro que mi progenitor no era ese fanático asqueroso dominguero, pues siempre conservó la dignidad y se reía de los apasionados que lo acompañaban con las respectivas 'cheves'.
Repito: de futbol sólo hablo cuando los Potros están en fase importante, si no, que se pierdan en la inmensidad del olvido. Ésta es una fase importante, como en la temporada 1992-1993 cuando logró coronarse, luego de visitar el inframundo de la segunda división. Recuerdo los nombres de algunos de los que participaron en tan memorable evento... Pero me quemo si los escribo. Ahora, no tengo ni la más p... idea de quiénes integren la escuadra ni quién los dirija... Me vale, es el Atlante.
Pues bien, tiemblen, gatos domésticos e infectos, que la fuerza de hierro viene con todo... y eso que no se ha cumplido el medio siglo, tiempo promedio que el Atlante (gracias) debe esperar para ganar un torneo...

Ay, padre mío, si estuvieras aquí...