... Respirar de tus entrañas. Siempre te invoco. Cómo quisiera saborearte y compartir contigo esos momentos, los más intensos. Respirar en ti, sofocarme por ti, que los latidos se intensifiquen y cerrar los ojos, y deleitarte, y tú dentro de mí. Luego afuera, luego adentro, que en cada alejamiento te mire y te obligue a que entres de nuevo.
Te quiero aquí, allá, en todas partes, he soñado que hacemos lo de antes en las noches, en los días, relajar mi mente, mi cuerpo, como cuando me invadías, cuando me tenías completita.
Te recuerdo y parece que te veo, que te huelo... y entristezco.
Cómo quisiera tenerte sólo a TI...
martes, 22 de enero de 2008
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2 comentarios:
mmm y pensar que tengo que competir con un maldito cigarro...
de veras, lo siento... y entristezco.
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